El muro

La cosa está que arde. Los múltiples perjuicios en forma de recortes económicos y de derechos sociales infligidos al personal por el Rector y su guardia de corps aguzan el ingenio de la tropa upemera. En la imagen podemos ver un rincón de una Escuela que se ha convertido en muro de las lamentaciones de los agraviados, y de forma bastante suave para lo que se oye de viva voz, la gente expresa su malestar con los dirigentes que nos han caído en suerte.

Con el pertinente recuerdo a las promesas electorales conculcadas, el desprecio que la dirección de la Universidad muestra al PAS, quizás como venganza al voto esquivo que el Rector Conde cosechó en el colectivo, de momento la expresión del malestar se muestra contenida. La falacia rectoral (que comentamos en la anterior entrada) quedó al descubierto en el propio Consejo de Gobierno del 24 de septiembre, el de la ignominia: los recortes sólo para algunos, los más débiles. Todos se han dado cuenta y ha quedado demostrada la debilidad del Rector Conde, que vencerá pero no convencerá.

Foto: Muro de las lamentaciones de una Escuela upemera (JV)